La naturaleza del Zakat

Autor: Abdul Malik Moreno

Es innegable que el zakat como impuesto se ha convertido a día de hoy en el "pilar" ausente pues no hay estructura alguna que facilite ni su recolección y mucho menos su distribución tal y como el mismo fiqh, sea de la escuela que sea, tiene establecido. Hay varias plataformas eso sí en internet, que dan la opción de poder efectuar su pago desde cualquier punto del planeta aunque son pocos los que hacen uso de ellas.

Para determinar la naturaleza de tal impuesto debemos hacer un repaso a su surgimiento en el año segundo de la nueva era islámica o en el año quince de la Revelación, observar las políticas llevadas a cabo por el mismo profeta y sus más inmediatos sucesores o más concretamente los cuatro primeros Jalifas y el propósito de tal impuesto.

Tomando ahora la Revelación como marco donde poder desarrollar el gran fenómeno social debemos situarnos en la primera etapa o período mequí cuando comienza la prédica coránica donde se invita al ser humano a vislumbrar a Al-lah a través de la creación, a hacerse conscientes de que hay un retorno inevitable y unos límites que no hay que traspasar, a la igualdad entre el señor y el esclavo, a liberar a estos y socorrer a los más débiles. A la oración y al zakat, al buen trato, a no romper los lazos de parentesco a la vez que unía a unos y a otros mediante la hermandad. A guardarse de la estafa y la mentira y amar en su lugar la justicia y la honestidad. No hay legislación alguna en ese período pero sí un giro en el proceder social de los que se han entregado en islam. Los más ricos de ellos gastaban grandes cantidades de dinero en la liberación de esclavos con los que acabarían compartiendo plato., incluso los hubo que tras liberar a sus propios esclavos tomaron a éstos como hermanos compartiendo con ellos sus riquezas. Los fuertes compartían con los débiles y nadie era desdeñado por su situación económica o estatus tribal. Durante ese período que duró trece años tanto el profeta como los que creyeron en el Mensaje no tuvieron poder gubernamental ni tampoco en la Revelación de esa época hay rastro legislativo.

Entramos ahora en la segunda etapa de desarrollo de la naciente comunidad islámica donde surge por vez primera la política derivada de la Revelación.

Grandes grupos de personas fieles al Mensaje y al profeta salen de La Meca dirección a Yátrib dejando atrás todas sus pertenencias con lo que Yátrib se llena de personas desposeídas.

La primera medida política que toma el profeta al llegar a Yátrib es hermanar a los emigrados (muhayirun) con los creyentes de Yátrib conocidos como Ansar, los auxiliadores, dando por terminada la condición de pobreza de los emigrados en cuestión de minutos donde éstos recibieron el sostén necesario para poder desarrollar sus vidas en la nueva ciudad. Este hecho es absolutamente esencial para poder comprender cómo se desarrolló la política que a partir de ese momento comenzaría desde ese momento.

La constitución de Medina es conocida como la primera constitución donde se tienen en cuenta las diferentes confesiones tanto tribales como en el ámbito de la fe. En ella se acuerda el fin de las discrepancias y deudas de conflicto de las distintas tribus. Se establece por primera vez en la historia la convivencia pacífica de diversas confesiones religiosas donde musulmanes, judíos, cristianos y politeístas tenían los mismos derechos y eran tratados de igual manera ante la ley.

Durante el segundo año se establece un único impuesto totalmente revolucionario pues mientras todas las civilizaciones colindantes gravaban impuestos a los más vulnerables, el impuesto llamado sádaqah que actuaba para el donante como zakat por purificarlo de la avaricia, la intolerancia y otros males del alma a la vez que contribuía al desarrollo social era únicamente pagado por aquellos que habían podido ahorrar durante un año y cuyos beneficiarios fueron aquellos que tenían necesidades varias. Normalmente eran las tribus las que pagaban y no tanto el individuo aunque también los había. Por primera vez en la historia se eximió a los más vulnerables a pagar impuestos ya que en la Revelación es una constante la llamada a ocuparse de los más desvalidos. El montante recaudado por el impuesto era distribuido de inmediato para de esta manera poder aliviar cuanto antes las cargas a las que estaban sometidas las gentes y dar de este modo fluidez a la economía. Los beneficiarios eran; los pobres que no tenían nada, los que tenían necesidades, los que se ocupaban de la recolecta y distribución también tenían su parte ya que era una dedicación, también recibían aquellos cuyos corazones estaban cerca de la fe y aquellos que la disputa había quebrado la amistad, se gastaba en la liberación de esclavos y en pagar las deudas de quienes no podían afrontarlas, se gastaba en todo aquello que era necesario para establecer el Mensaje de manera social y en los viajeros, tal y como se establece en el Sura 9:60.

En cuanto a los ejércitos el profeta no lo institucionalizó a la manera de las civilizaciones colindantes sino que llamaba a través de la Revelación a que fuesen las mismas gentes las que se defendiesen en caso de agresión y/o para recuperar lo que se les había usurpado. No hubo impuesto destinado a la manumisión de los ejércitos sino que una vez más era la misma población la que abastecía de todo lo necesario. El único impuesto iba directamente a los anteriormente mencionados. Los soldados no tenían sueldo pero sí obtenían una parte del botín cuyo reparto comenzaba con un quinto para Al-lah y su Mensajero o lo que es lo mismo, para materializar el Mensaje de Al-lah cuyos beneficiarios eran de nuevo los mismos que recibían en impuesto llamado sadaqa o zakat. En el reparto del botín y al amparo de la Revelación quedaban exentos los ricos pues el propósito de la riqueza es su reparto equitativo y no la acumulación tal y como se condena en la Revelación.

No hubo ejércitos ni policías que controlasen el cumplimiento de los preceptos que aportaba la nueva fe. El profeta mandaba a cada tribu una persona que les instruyese y una vez que éstos la habían asimilado regresaban de nuevo dejando que se desenvolviesen por sí mismos.

En cuanto a los prisioneros de guerra se les dejó en libertad una vez acabada la hostilidad o bien a cambio de una compensación económica. Quedó totalmente prohibido esclavizarlos.

Los recaudadores tenían terminantemente prohibido coaccionar en el pago y no tomaban de ellos alimentos perecederos sino únicamente aquellos que podían ser trasportados sin temor a que se deteriorasen.

Hay que decir que se trataba de un bajo impuesto ya que se trataba de no hacer mella en la economía sino en una distribución equitativa que no igualitaria a pesar de que la Revelación desafía al amo a equipar al esclavo mediante su riqueza.

El único cargo de control se estableció en el mercado donde una mujer era la encargada de que se cumpliesen con los pesos y medidas así como en la supervisión de las mercaderías donde se prohibía toda mercancía deteriorada o en mal estado. Este hecho es sumamente importante ya que por un lado indica que es el comercio como motor económico de la sociedad el que debe ser vigilado para evitar cualquier posibilidad de abuso que acabe provocando una brecha social y también por el hecho de que fuese una mujer la que ocupara el cargo, rompiendo de esta manera una anterior sociedad donde la mujer carecía de derechos, de voz y voto en lo referente a la esfera social.

La base de la política del profeta se basaba en la protección de los más débiles, la diplomacia y en alentar al empoderamiento de la ciudadanía sin que hubiese la más mínima coacción. Hombres y mujeres, amos y esclavos compartían los mismos espacios públicos.

Si bien parte de la política estaba relacionada en la liberación de esclavos, no hubo una declaración que la aboliese ya que ello hubiese causado una gran catástrofe al dejar a miles de personas sin lo elemental, en cambio, sí que alentaba a tener con los esclavos el mismo trato de amabilidad, honestidad y cariño que se le daba al hombre libre y a facilitar la carta de libertad en caso de que un esclavo la solicitase.

Para poder hacer efectiva esta política fue necesario que entre los ciudadanos hubiese una parte importante de la población sometida a la Revelación la cual hace especial énfasis en la distribución constante de la riqueza en favor de los más vulnerables como un acto de justicia, equidad y equilibrio social. Fue gracias a esa profunda comprensión del propósito divino de sus gentes lo que les hizo crear la primera comunidad en la historia cuyo único impuesto tenía como beneficiarios a los que en otras civilizaciones se les obligaba al pago. la asimilación del zakat coránico permitió el establecimiento del impuesto llamado zakat.

Esta política instaurada por el profeta Muhammad tendría su continuidad bajo la gobernabilidad de sus más inmediatos sucesores, es decir, los cuatro primeros Jalifas; Abu Bakr as Saddiq, Umar ibn Al Jattab, Uzmán inb Afán y Alí ibn Abu Talib.

El jalifa Abu Bakr se vio envuelto en un conflicto con ciertas tribus que desistían del pago del impuesto por lo que se alzó en armas contra ellos hasta que hicieron efectivo el pago. Hay que decir que el impuesto es lo que otorga poder a cualquier forma de gobierno con lo que el Jalifa Abu Bakr actuó en su forma de legislador ya que se trataba de un impuesto gubernamental que era la esfera que comandaba. Su mandato duró tan sólo dos años hasta su fallecimiento.

Durante el mandato de Umar ibn al Jattab al cual se le designaría el trato de Emir de los creyentes, se lograría la victoria sobre vastos territorios como Iraq, Persia, Bizancio, Egipto, Cirenaica entre otros. Designó diferentes gobernadores los cuales debían presentar sus riquezas para ser tasadas antes de la toma de posesión del cargo, se les asigno un sueldo anual y la prohibición taxativa de poder comerciar para que no hubiese lucro a partir de su posición política. Toda riqueza que sobrepasase las que ya contaban más la que obtuvieron mediante sus sueldos eran expropiadas y puestas a disposición del bait al mal. El mismo Abu Huraira relata que la riqueza que obtuvo como gobernador de Bahrain le fue confiscada y puesta a disposición del bait al mal por parte de Umar.

Estableció un control exhaustivo a los gobernantes poniendo a disposición de la ciudadanía los nombres y bienes de sus gobernantes así como las misivas con las que mantenía contacto con los mismos. Obligaba a los gobernantes a peregrinar anualmente a La Meca donde se exponían las quejas que los ciudadanos tuviesen de ellos. Ningún cargo de gobernador duraría más de dos años para de esta manera evitar una posible corrupción.

Continuando con las políticas de asistencia al necesitado basadas en la Revelación, establece por primera vez en la historia el pago a pensionistas que tuviesen necesidad quedando excluidos los ricos. También establece un pago por nacimiento para que ningún niño creciese sin tener solventadas sus necesidades básicas siendo eso un gran alivio familiar. Estos pagos se hacían efectivos a través de la recaudación del único impuesto y de los beneficios reportados de las conquistas al entrar en el marco de la categoría del Camino de Al-lah.

En cuanto a los cristianos, judíos, zorastrianos se les permitía vivir y regirse bajo las leyes de su propia fe, mantener sus templos y símbolos, se les cobraba un único impuesto estimado en una décima parte de la riqueza( no se hasta qué punto ese décimo puede ser el diezmo que las Escrituras anteriores dejaron para sus seguidores, Al-lah sabe) , en caso de aceptar la nueva fe su impuesto pasaría a ser el zakat o sadaqah. Hay que decir que la yizia, es decir, el impuesto a no musulmanes no tiene una cantidad fijada en la única mención coránica pero sí resulta como excepcionalidad para el pagador en caso de guerra por lo que fue un impuesto que obedecía a la protección. Quedaban exentos del pago de la yizia las mujeres, los niños, los ancianos y los discapacitados.

Sobre las tierras conquistadas se prohibió la expropiación, se dejó las tierras en manos de sus dueños, se cedieron tierras a aquellas personas que las quisiesen cultivar a cambio de que diesen una pequeña parte en favor de los más desfavorecidos.

En cuanto a la lengua no se les impuso el árabe sino que se les permitió continuar con sus lenguas maternas. No hay datos de que obligasen a realizar las oraciones en lengua árabe a las personas que abrazasen la nueva fe.

Sobre la política desempeñada por el que sería el nuevo jalifa tras el asesinato de Umar, Uzmán ibn Affan, continuó siendo la misma en cuanto a fiscalidad, incrementó los salarios y permitió la compra y venta de las tierras en las regiones conquistadas. Se le atribuye cierto favoritismo al delegar funciones de gobernador a sus familiares, por lo demás, la política continuó en la misma línea de favorecer al más débil.

Sobre las políticas de Alí ibn Abi Talib poco se puede decir debido a su turbulento mandato por las negativas a reconocer su autoridad del que era el gobernador de Siria, Muawiah ibn Abi Sufián, quien se declararía Califa tras el asesinato de Alí, dando así comienzo a la dinastía Omeya quienes cambiarían de raíz toda la política anterior y que continuaría con la dinastía Abbásida y así hasta nuestros días.

Una de tantas medidas que se cambiaron fue la de aumentar los impuestos a los no árabes musulmanes ya que entre la población conquistada había un gran número que habían abrazado la nueva fe, a estos se les llamaría mawali y eran tratados como creyentes de segunda hasta el punto que Ahmad al Yaqubi narra que durante el califato de Abdulmalik ibn Marwan, éste mandó a Ibn Shihab az Zuhri inventar un hadiz para que los sirios no fuesen a Meca a peregrinar debido a que era un bastión de la oposición de los Zubayris y que en cambio podían peregrinar en Jerusalén donde mandó construir la Cúpula de la roca con ese propósito, solo Allah sabe si esto es cierto, aunque sí consta el trato desigual con los mawali en cuanto trato de fe como a la presión fiscal.

Aquí es donde el cambio fiscal toma un rumbo que llevaría al zakat a convertirse en un ritual religioso al perder todo el significado. Los Abbásidas comenzaron a poner impuestos paralelos al zakat a los musulmanes a la vez que aumentaron la presión sobre el campesinado. Elevaron las tasas en cuanto a comercio, exportación e importación por lo que el estado basaría sus políticas fiscales en la presión a los débiles haciendo todo lo opuesto que se estableció con el zakat. El zakat se siguió pagando pero sin el significado que éste tenía, todo el modelo social establecido por el profeta y continuado por sus más inmediatos sucesores se hizo añicos en cuanto se empezó a cobrar impuestos a los pobres.

En cuanto a la esclavitud se continuó esclavizando a los cautivos de guerra y mercadeando con seres humanos llegando hasta nuestros días debido al seguidismo literal de las escuelas de jurisprudencia surgidas de las épocas dinásticas.

La lengua árabe se impondría en todo el territorio como lengua del estado y de la fe haciendo obligatorio su uso en las oraciones.

La sencillez de la mezquita pasaría a ser ostentosa al modo de los templos de las gentes conquistadas.

Se instauró una especie de clero a semejanza de las gentes de Escrituras anteriores programando de esta manera todo lo referente a los distintos rituales, se estableció juicio y pena sobre asuntos relacionados con la creencia. Se cambió en sentido de la herencia recogida en el Corán y el quinto del botín perteneciente a Al-lah y su Mensajero pasaría a manos del emir.

Podríamos adentrarnos mucho más en cuanto a los cambios que provocaron las diferentes dinastías en asuntos de política y fe pero creo que hasta aquí es suficiente para comprender el cambio que eso acaecería en el pensamiento colectivo de los musulmanes hasta nuestros días.

CONCLUSIÓN Y PROPUESTA

La política llevada a cabo por el profeta y sus califas bien guiados solo fue posible gracias a la entrega de la población, la cual había asimilado en sus vidas la necesidad de compartir de sus bienes, su tiempo y su esfuerzo para el desarrollo de la sociedad, sin esa entrega de la ciudadanía no hubiese sido posible que una sociedad pudiese desarrollarse mediante un solo impuesto. Tan solo se hizo posible cuando el zakat coránico impregnaba el quehacer diario de los creyentes los cuales distribuían de manera dinámica la riqueza hasta el punto de que pudieron ser gobernados sin estado. Este es a mi entender, el profundo significado del impuesto llamado zakat. Un modelo impositivo liberador.

Tal y como sucedió con el pueblo de israel con el sabat, el impuesto zakat ha quedado incrustado en la ritualidad islámica donde ahora forma parte de una obligación legal impuesta por los hombres sin que haya el menor rastro de él en la escritura de Al-lah. No por eso queda exento su pago ya que al igual que ocurrió con el sabat, su pago se ha vuelto una obligación. Y Al-lah sabe más.

En lo que respecta a su pago en estos tiempos y tratando de seguir de cerca su significado primario en las capacidades que se encuentran las diferentes comunidades islámicas en territorio no musulmán, sugiero la implantación en las diferentes comunidades de asociaciones dedicadas a la recogida y distribución de alimentos que cubra las necesidades básicas de sus miembros y de aquellos no musulmanes que lo requieran, que la sede de la asociación sirva como bait al mal que de suministro a aquellas personas que tengan necesidad, instaurar en ella una oficina dedicada a la recaudación y distribución del zakat anual, así como también de diferentes departamentos que recojan las necesidades que haya entre los miembros como por ejemplo abogados que ayuden en la adquisición de papeles legales y necesarios para desarrollar libremente la vida de quienes los precisen. Sugiero también la distribución de botes en comercios de primera necesidad como son los establecimientos de alimentación, ropa y calzado y farmacias que sirva como fondo para que aquellas personas que tengan necesidad puedan adquirir aquello que precisen.

En cuanto al trato dado por los Omeyas a los mawali vemos en nuestros días multitud de quejas de conversos al islam que evidencian ese mismo trato como creyentes de segunda, por lo que nos vemos en la necesidad de una educación temprana para nuestros jóvenes basada en la equidad y la cooperación.

Es una evidencia que las primeras comunidades de creyentes basaron su vida en la acción más que en el estudio y que fue precisamente esa actitud de poner en práctica lo aprendido lo que les hizo grandes, por lo que queda claro que lo que se precisa son acciones que vayan en una misma dirección donde cada miembro de la comunidad pueda desarrollarse y ser de utilidad.

Dar la importancia al ritual pero darle más importancia a las acciones que lleven a la comunidad al desarrollo ya que el sentido de la oración es el recuerdo y el de zakat llevar a cabo acciones derivadas de la voluntad del Recordado.

El éxito pertenece única y exclusivamente a Al-lah, el cual se manifiesta mediante sus Atributos en la medida en que éstos son llevados a cabo por sus criaturas.

No hay dios ni señor que deba ser servido junto a Al-lah, el mantenedor del equilibrio y la equidad. Paz y bendiciones sobre sus profetas y mensajeros así como con aquellos que siguen la Guía.